jueves, 19 de junio de 2008

DESARROLLAR


El acto contrario al arrollar o enrrollar. Desenrrollar un papiro, hacer legible el total de lo contenido en un escrito arrollado. La acción del des-pliegue o el des-arrollo reporta diversos movimientos. Por un lado se muestra, se explicita lo oculto, lo que de otra manera permanecía plegado o arrollado (vuelto sobre sí mismo). La acción de desarrollar vulnera la intimidad de lo contenido en forma reflexiva; pone a disposición del público lo que había sido guardado bajo la custodia de la propia subjetividad. Es necesario dejar en claro la nota evidentemente violenta de este acto de desarrollo. Digo, lo que se encuentra arrollado no tiene por qué ser vuelto al plano bidimensional. La necesidad de desarrollar no puede más que explicarse por esta manía que se extiende en grandes proporciones, según la cual, “hay que poner las cosas sobre la mesa”. Toda expresión elíptica debe pasar por la regla de estirar, para que pueda ser mensurada y comparada con otras líneas rectas. Con estas dos últimas metáforas del campo de la geometría quiero mostrar el intento de simplificación que importa la actividad de desarrollar, contrariamente a lo que comúnmente se cree. Quien piense que el acto de desarrollar es de naturaleza analítica está completamente equivocado. El desarrollo obtiene un objeto completamente diferente a su estado anterior y todo el material desarrollado no puede estar jamás contenido en el objeto sin desarrollar. El desarrollo es un movimiento de creación y como toda creación, es un movimiento de tergiversación de lo dado.